
La potente y estentórea campaña contra el recientemente inaugurado viaducto que cruza el óvalo Monitor y que beneficia a cientos de miles de vehículos que por ahí transitan, no cesa. Cualquier persona que haya tenido la oportunidad y suerte de conocer ciudades tan o más grandes que Lima tiene que saber que las horas punta constituyen un dolor de cabeza para sus ciudadanos y autoridades ¿Por qué Lima tendría que ser la excepción? El suscrito utiliza esa vía casi a diario y puede dar fe que es una gran obra que sí ha aliviado, inclusive en horas punta, el infernal tráfico que había en la zona, una que la transita muchísima gente de todos sitios.
Vivir clamando por utopías e irreales “soluciones integrales” solo caben en las cabezas de esa gente insatisfecha con todo y que vive quejándose siempre ¿Que la referida obra sea la panacea definitiva para el tráfico en la zona? Solo alguien con un severo retardo mental puede sostener algo así ¿Qué va a aliviar (de hecho ya lo está haciendo) el farragoso embotellamiento que había previa a su inauguración? Por supuesto que sí ¿Qué faltan obras que coadyuven a aligerar el endemoniado tráfico que padecemos los limeños? Claro que sí, pero primero: no se puede solucionar todo de la noche a la mañana y segundo: no se puede criticar todo lo que hace, pues esa misma gente también critica cuando no se hace nada. La verdad es que nada, absolutamente nada, les acomoda. La otra noche el vacado ex alcalde Muñoz Wells le explicaba -con una paciencia digna de Job- todo esto a un impertinente e ignorante hombrecillo de prensa que le discutía…ya ni nos acordamos qué.
Lima necesita -y a gritos- más infraestructura vial y la culminación de los tan ansiados ramales del metro. No hay magia aquí, se trata de impulsar las obras ya avanzadas o por empezar del transporte público intermodal (metro, metropolitano, buses alimentadores, etc.) y las obras necesarias para que fluya mejor el tráfico vehicular de autos particulares (incluyen taxis, ninguno de los cuales van a desaparecer por si acaso). El que no lo quiera ver así o vende humo, vive en Saturno o no tiene idea de lo que es una megalópolis. Lima Metropolitana (incluida la ciudad portuaria del Callao) tiene una aglomeración urbana cercana a los 11 millones de habitantes en aproximadamente ¡3,000 km2! Quinta en América Latina (solo por detrás de Sao Paulo, Ciudad de México, el Gran Buenos Aires y Rio de Janeiro) y está ubicada entre las 30 más grandes del mundo.