Eloy Espinoza-Saldaña es uno de esos abogados que avergüenzan a la profesión. Fue una desgracia como magistrado, sesgado y mediático como él solo (cuando un buen juez debe expresarse por sus resoluciones y sentencias y no andar “comentando” y “aclarando” sus decisiones en cuanto medio de prensa lo acoja). Pues bien, ahora pretende confundir a la opinión pública diciéndonos una verdad de perogullo: que se puede derogar una ley que el mismo Tribunal Constitucional ha declarado constitucional.
Por supuesto que sí, pero tal acción es única, exclusiva y excluyente del Congreso, no del Ejecutivo ni de nadie más. Ya el impresentable premier Torres presentó una írrita cuestión de confianza para que el parlamento derogue la ley 31355 (que justamente regula y a nivel constitucional dicha figura, una que NO puede entrometerse en atribuciones propias del Legislativo). Dicha “cuestión de confianza” sobre una norma que además fue consagrada por el mismo TC como absolutamente constitucional no debería conducir a otro sitio que al tacho de basura.
Torres, no contento con el despropósito anterior, presentó la semana pasada otra, también írrita, “cuestión de confianza” para que el Congreso derogue otra ley: la 31399, norma referida a las restricciones respecto a la convocatoria a referéndums directos, algo absolutamente prohibido por la ley y la Constitución y que también ha merecido el rechazo del TC anteriormente. Sobre el particular, Espinoza-Saldaña -con ese estilo ladino y confuso que lo caracteriza- le dice a su medio favorito (RPP ¿Cuándo no?) que “no cree que han escogido el mejor caso” y que el Congreso no puede dilatar este asunto por ser uno “muy discutible”.
¿Muy discutible? Pues de tal no tiene nada, es claro, diáfano y no cabe interpretaciones infelices sobre ambos despropósitos presentados por el impresentable Torres, un orate que funge de premier y que lo único que persigue es dañar el balance de poderes desestabilizando nuestra frágil democracia. Ello con la evidente ayuda de sujetos como Espinoza-Saldaña, siempre prestos a apoyar -esta vez de manera indirecta- los intentos de este desgobierno de rufianes y oportunistas que se maneja al margen de la ley y la Constitución…en todos los aspectos de su accionar. Es lunes y empezando la semana debemos combatir a estos tinterillos del derecho de manera frontal y explícita.