Entonces el Tribunal Constitucional está bien si resuelve que el productor y activista progre Ricardo Morán puede inscribir sus hijos sin consignar el nombre de la madre, pese a que la legislación nacional no contempla la figura de la maternidad subrogada (también denominada vientre de alquiler) utilizada por Morán para tener hijos, que por lo de más ya tienen nacionalidad americana, por tanto apátridas no son.
Pero ese mismo TC está mal si resuelve a favor del habeas corpus que dictaminó la liberación del anciano y enfermo expresidente Alberto Fujimori, quien sigue encarcelado injustamente cortesía de esa infame CIDH con la miserable anuencia de las autoridades peruanas correspondientes. El mismo doble estándar moral de siempre, el de los rojos/progres/caviares y de los obsesivos y enfermizos antifujimoristas (de paso Morán es uno de ellos)…también de siempre.
De otro lado, no se entiende la sostenida y virulenta campaña de casi toda la prensa contra el gobierno de Dina Boluarte. Se comprende en los sectores radicales de la siempre inútil y fracasada izquierda, desplazada del poder que tenían con Pedro Castillo hasta el frustrado golpe de Estado y por supuesto en la caviarada con su cansina monserga pro derechos humanos de los vándalos que aterrorizaron al país ni bien asumió la presidente el mando en diciembre de 2022. Pero que sectores democráticos de la derecha se sumen a este cargamonton es incomprensible. Este gobierno de transición si bien es mediocre y a veces hasta errático no es uno como para darle con bombo todos los días por lo que hace y por lo que no hace.
Sobre todo porque si este gobierno cae sería un paso seguro al abismo. Con una situación política muy frágil, sin el menor asomo de candidaturas viables ni partidos medianamente consolidados, sin reformas de índole electoral urgentes, con un parlamento ultrafraccionado y muy cuestionado (asume el cargo el presidente del Congreso quien debe llamar a elecciones de inmediato), fuera de una economía en recesión y como cereza de este indigesto pastel una rampante y muy peligrosa situación de inseguridad ciudadana, lo peor que le podría pasar al Perú hoy es afrontar un proceso electoral en un escenario altamente crispado como el que se relata.
¿A eso apunta esa prensa con la citada campaña? ¿En serio puede haber gente que piense que tener siete mandatarios (PPK, Vizcarra, Merino, Sagasti, Castillo, Boluarte y el que venga si sale esta última) en siete años es lo que necesita el país? ¿En serio los viajes al exterior de Boluarte, una demora de días en recoger a nuestros compatriotas varados en Israel (los que finalmente fueron rescatados), una serie de gastos nimios de caja chica y nombramientos intrascendentes en algunos ministerios merece tanta crítica? Absolutamente irresponsable.